Rusia y China, campeones del rechazo entre los latinoamericanos
La imagen de los dos principales miembros de los BRICS, Rusia y China, está en horas bajas entre los latinoamericanos, con un 17% y un 19% de aprobación respectivamente. Es lo que se desprende de una encuesta realizada el pasado mes de septiembre por el Latinobarómetro, a pedido de la Fundación Friedrich Ebert Stiftung y de la revista ‘Nueva Sociedad/Grupo Dialogo y Paz’. Este porcentaje queda muy por debajo de Estados Unidos, valorados por el 47% de los encuestados, y de Alemania (43%).
Es la primera vez que este estudio de opinión pública dedica una sección a la visión de asuntos internacionales en el continente americano. En esta edición especial, el Latinobarómetro aborda aspectos como el nivel de democracia, el modelo de desarrollo y la influencia económica de cada país. La encuesta, titulada ‘¿Qué se piensa en América Latina sobre la Unión Europea?’, fue realizada antes de estallar el conflicto entre Rusia y Ucrania. Lo que se desprende es un claro rechazo contra el Gobierno del presidente Vladimir Putin, declarado cero o poco democrático por el 30% de los 12.000 entrevistados, originarios de diez países de la región.
En una escala de 1 a 10, donde 1 corresponde a “no es una democracia” y 10 a es “una democracia plena”, Rusia recibe una nota de 5,1, frente al 7,7 de Estados Unidos y de Francia, y al 7,5 de Alemania. “La valoración de la democracia en Rusia varía mucho según las edades. Para el 46% de las personas mayores de 60 años, aquellas que vivieron la Guerra Fría, Rusia no es un régimen democrático. En cambio, solo el 15% de los jóvenes de 18 a 29 años tiene esta misma opinión”, señala Carlos Luján, profesor de Relaciones Internacionales, Negociación y Metodología de la Investigación en la Facultad de Ciencias Sociales y la Facultad de Derecho de la Universidad de la República, en Uruguay. Según este politólogo, esta percepción podría haber empeorado tras la invasión de Ucrania por parte de Rusia.
«Hay una visión bastante pragmática de la realidad»
China sale incluso peor parada, con una valoración de 4 puntos. Sin embargo, este dato no corresponde necesariamente a un sentimiento antichino. “Cuando preguntamos ‘quién es el mejor socio’, en asuntos de medio ambiente aparece Europa. Pero en temas de cultura y de educación, China es tan importante como Estados Unidos. En lo que a comercio e inversiones se refiere, China es considerado con diferencia el principal socio por el 46% latinoamericanos”, explica Carlos Luján.
“Nos llamó la atención que siete de cada diez latinoamericanos ven a China como el mejor socio para los temas tecnológicos. Esto demuestra que hay una visión bastante pragmática de la realidad”, agrega. Este profesor resalta que tres de cada diez latinoamericanos valoran positivamente el modelo de desarrollo chino. “Este no deja de ser un dato relevante, a pesar de estar por debajo de Alemania y Estados Unidos, porque quiere decir que un tercio de los latinoamericanos ve a China como un modelo”, afirma Luján.
“El hecho de que los encuestados reconozcan que China no es una democracia o que no es el modelo que quieren seguir, no significa que existe un prejuicio contra este país. Los entrevistados ven a China como una referencia económica y de inversiones”, recalca Mónica Hirst, profesora de Relaciones Internacionales de la Universidad de Quilmes y profesora visitante en el Instituto de Estudios Sociales y Políticos de la Universidad del Estado de Río de Janeiro.
De hecho, China y Estados Unidos son considerados los países más influyentes en términos económicos. En especial, el Cono Sur y la región andina ven a China como el segundo actor más influyente en la región, solo por detrás de EE UU. Curiosamente, Brasil es el país que peor valora tanto a China como a Rusia, a pesar de ser uno los miembros de los BRICS.
Estados Unidos y Alemania como modelos de desarrollo
La salud democrática de los países tuvo un peso preponderante a la hora de valorar positiva o negativamente a los dos ‘villanos’ del Latinobarómetro. “Muchos países del Cono Sur que sufrieron dictaduras sangrientas y precisamente por eso viven hoy una revalorización de la democracia. En Brasil, por ejemplo, hay una importante preocupación por un eventual golpe de Estado”, recuerda Luján.
Mónica Hirst resalta que esta encuesta demuestra que los latinoamericanos están muy bien informados sobre los principales asuntos internacionales, algo que sorprendió a los propios autores del Latinobarómetro. “No pensábamos, por ejemplo, que los latinoamericanos tuviesen tan claro lo que ha sido el Brexit o que Suiza no integra la Unión Europea, o que en la actualidad hay una fragmentación de poder internacional, sin un liderazgo político claro”, señala esta profesora brasileña.
Estados Unidos y Alemania representan, para los latinoamericanos, los mejores modelos de desarrollo. “Una de las cosas que esta encuesta pone en evidencia es que las sociedades latinoamericanas tienen posiciones y percepciones claras sobre el escenario internacional. Pero no siempre estas posiciones reflejan la política exterior implementada por sus Gobiernos”, apunta Hirst.
La Unión Europea, como referente en protección al medio ambiente
Por otro lado, el Latinobarómetro muestra que Europa es la región con la cual los latinoamericanos prefieren mantener vínculos económicos y políticos. Cabe destacar que en esta edición no hubo preguntas sobre el acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea, que tras 30 años de negociaciones está a la espera de ser ratificado por todos los países de la UE. Sin embargo, este asunto será abordado en un futuro próximo, ya que esta encuestadora pretende lanzar estudios subregionales.
La pobreza extrema y el cambio climático, junto a la violación de los derechos humanos, son las principales preocupaciones en la región, junto a la corrupción. “Nos sorprendió que los latinoamericanos identifican muy claramente a la Unión Europea como un líder en la protección del medio ambiente, en el extremo opuesto de Estados Unidos y China”, afirma Hirst.
Sin embargo, esta profesora de Relaciones Internacionales considera que América Latina todavía no puede configurarse como un nuevo modelo de desarrollo y de gestión del medio ambiente en la actual coyuntura. “Sin superar los problemas sociales que aquejan el continente, esto es imposible. En este sentido, la encuesta es muy equilibrada, porque muestra una aspiración a un futuro róseo, pero al mismo tiempo revela que hay una percepción durísima de la realidad, marcada por la exclusión social y la corrupción. No hay negación de la realidad”, declara.
Otro dato llamativo es que el crimen organizado preocupa mucho más a los latinoamericanos que un posible uso de armas nucleares. Sin embargo, es importante resaltar que esta pregunta fue hecha antes de que el presidente ruso Vladimir Putin amenazase a los países occidentales con recurrir a este tipo de armamento en caso de sentir su soberanía en peligro.
En general, la Unión Europea sale como ganadora del filtro del Latinobarómetro, ya que en América Latina es percibida como un actor influyente. Desde el punto de vista económico se sitúa incluso encima de EE. UU. “Los latinoamericanos asocian la imagen de Europa a la cultura y al estado del bienestar, más que a la riqueza, al capitalismo o al colonialismo”, señala Luján. Prevalece, en general, la idea de que la UE no se pliega a Estados Unidos.
La población apunta a alianzas regionales en temas de salud
Los encuestadores también preguntaron sobre la gestión de la pandemia del coronavirus. Los datos muestran que América Latina prefiere respuestas regionales a los problemas globales planteados por la emergencia sanitaria más grave del último siglo. “Este dato sugiere que la gente piensa que debería darse un proceso de cooperación latinoamericana, especialmente tras las dificultades de producción y distribución de la vacuna de AstraZeneca en Argentina y en México. El asunto es si las élites gobernantes van a escuchar estas demandas populares o si prefieren seguir una política del sálvese quien pueda”, explica Luján.
La conclusión de la profesora Hirst es que América Latina vive un momento de ausencia internacional debido a que las instituciones regionales actualmente no tienen ningún peso y casi han dejado de existir. “Hay un vacío de regionalismo, pero esto no significa que somos una región poco atenta o poco preocupada con los asuntos internacionales y que no buscamos en la realidad internacional un camino que nos ayude a mejorar nuestras pocas realidades”, asevera.
La entrada Rusia y China, campeones del rechazo entre los latinoamericanos se publicó primero en Red De Noticias .